12 MESES 12 ACCIONES
Ahorra energía
No la derroches y siempre que puedas usa la menor cantidad de energía posible. Hay muchas maneras:
1.- Usa la regleta
Ahorra electricidad conectando todos los electrodomésticos a una regleta con interruptor así desconectas por completo cuando no los utilices, incluso tu ordenador, TV, sintonizadores, cargadores….
2.- Regula la temperatura
Por cada grado que bajes estarás ahorrando hasta un 6% de consumo energético en calefacción. Mantén cerradas las puertas y ventanas, y no dejes nunca la calefacción encendida cuando no estés (un termostato programador permite que la estancia se encuentre a la temperatura adecuada cuando llegamos).
3.- Ventila bien, ventila rápido
En invierno, la mejor forma de ventilar una habitación es abrir las ventanas no más de 10 minutos. No dejes nunca la calefacción encendida con la ventana abierta, aunque sea solo una rendija.
4.- Cocina con cabeza
Cocinando, tapa la cacerola. Cuando vayas a hervir agua, evita calentar más de la que necesites. Usa olla a presión, mejor la súper-rápida.
5.- Electrodomésticos eficientes
Ten electrodomésticos con el consumo más eficiente. Fíjate en la etiqueta obligatoria, que indica los distintos niveles de eficiencia energética (A-G), el mejor es A+++. Su cambio te reportará grandes ahorros en el término de energía de la factura eléctrica, y contribuirás a reducir las emisiones anuales de CO2.
6.- Cuida tu nevera
En el caso del frigorífico, no lo pongas nunca cerca de fuentes de calor (horno, cocina…). Abre las puertas el menor tiempo posible y verifica que cierran bien. No obstruyas la ventilación de las rejillas de atrás, mantenlas limpias de polvo. Además, los frigoríficos consumen más energía cuando acumulan hielo. No introduzcas nunca alimentos calientes. Descongela la comida pasándola del congelador a la nevera un día antes. Ajusta el termostato a una temperatura no excesivamente baja. Por cada grado centígrado de frío su consumo de energía aumenta un 5%.
7.- Lava a conciencia
Para la lavadora, lava en frío y olvídate del prelavado. Un lavado normal será más que suficiente y reducirás el consumo energético hasta un 80%. Realiza siempre el lavado con la lavadora llena, como mínimo a unos tres cuartos de su capacidad. Cuando necesites cambiar de lavadora, elige sin dudarlo una de categoría A+++, tanto en consumo de energía como de agua. Seca la ropa al aire en lugar de utilizar secadora.
8.- Llena el lavavajillas
Utiliza el lavavajillas siempre llenándolo y no laves los platos antes de meterlos en la máquina.
9.- Ten luces con la iluminación
Sustituye las luces de tu casa por bombillas led, reducen el consumo energético hasta un 80-90% respecto a las antiguas incandescentes. Apaga siempre las luces de habitaciones que no estés usando. Para las zonas muy transitadas lo ideal son los interruptores de presencia.
10.- Dúchate ahorrando
Date una ducha rápida en lugar de un baño. Apaga el grifo mientras te enjabonas. Instala un economizador de agua en la ducha: acorta a la mitad el consumo de agua y de energía. Un grifo monomando o con control separado de caudal y temperatura ayudan a ahorrar agua y energía de forma fácil y cómoda.